Historias de fantasmas
«Esto me pasó de chico. Estaba visitando a mi familia materna; vivían en una granja. La mejor forma de llegar ahí era tomar el tren de las 3:30 a.m. a la estación del pueblo, que estaba a 3 o 4 kilómetros de la granja. Ellos no tenían auto en ese entonces; así que, había que caminar hasta ahí cargando el equipaje. Mi tío y mi tía decidieron venir con nosotros a la estación porque era invierno; estaba oscuro y había algo de niebla. Las mujeres iban adelante, y mi tío y yo estábamos yendo unos 4 metros atrás, cargando todo el equipaje. Andábamos por un camino angosto de tierra con campos a los costados. Mientras caminábamos, vi dos mujeres que se dirigían a mi mamá y otras que venían de un campo a la izquierda. …
… No lo pensé mucho porque creí que la gente se despertaba temprano en los pueblos y que podían ser personas que también iban a la estación de tren. Luego de 5 minutos, más o menos, las mujeres se separaron y se dirigieron a los campos del lado izquierdo. Luego de llegar a la estación, le pregunté a mi mamá sobre las mujeres y me dijo: “¿Qué mujeres?”, a lo que le respondí: “Las dos que estaban caminando a tu lado”. Le expliqué detalladamente la ropa que estaban usando, ya que no pude verles la cara. Mi tío no le prestó atención. Todos pensaron que estaba intentando gastarles una broma. Así que, lo olvidé. Mi mamá llamó a mi tío después de llegar y él le dijo que todavía estaban en la estación, esperando a que saliera el sol. También las había visto y sabía quiénes eran. No quería que me asustara, por eso no dijo nada en ese momento. Mi tío le contó a mi madre que esas mujeres habían muerto hacía unos años; se habían suicidado».