Los trapos de cocina no son para la hora del té
Los trapos de cocina son el jugador más valioso en cualquier cocina. Nos ayudan a realizar muchas tareas, pero se necesitan más que nada para limpiarnos las manos. Ya sea que tengas comida en las manos o si acabas de lavártelas por enésima vez, siempre tienes uno a mano. Con tanto uso, pueden ensuciarse muy rápido.

La frecuencia con la que los lavas depende de cuánto los uses. En general, puedes usar el mismo trapo por tres o cuatro días, pero si limpias derrames o los usas para otro trabajo difícil, puedes lavarlos todos los días. Cuando se trata de las bacterias y tu cocina, ¡es mejor prevenir que lamentar!